Propone la incursión en un bosque virtual, a través de la cual se busca encontrar y observar a los espíritus que lo protegen (kodamas).
Un curioso guardaparque nos acompañará en la búsqueda de los kodamas adentrándonos en el bosque. Podremos encontrar desde los omes, pequeña especie que vive y protege arbustos y pastizales, hasta los aokis, gigantes que habitan en las zonas más profundas.
A estos kodamas que protegen a los árboles de río o que provienen de las enredaderas los veremos en su hábitat, volando, jugando y comiendo, casi a escondidas para no asustarlos.
Disfrutaremos de su belleza, de la plástica de sus formas y movimientos que parecen venir de un mundo onírico y trataremos de entender su relación con la naturaleza en un profundo y poético alegato ecológico. Al final, aprenderemos que estamos tan íntimamente ligados a la naturaleza que cuando ella sufre sufrimos nosotros y cuando nosotros amamos, ella ama.